GenZ, creo que seremos conocidos por nuestra fe y por cómo la exhibimos: Atrevidos y sin vergüenza 🙌✨
En el capítulo 3 de Daniel, encontramos la historia de Sadrac, Mesac y Abednego. Ellos tenían una fe loca. Vivían en Babilonia, si una ciudad antigua ¿qué tiene eso de importante? Bueno, eran judíos que creían en Dios pero vivían en una tierra donde la gente creía en muchos dioses diferentes. Y trabajaban para el rey, el rey Nabucodonosor.
El rey construyó una imagen de oro, una estatua, un ídolo para ser adorado. Y decretó que todos en la tierra debían inclinarse y adorar esta estatua. Así que todos en Babilonia lo hacen... excepto estos 3 tipos. Ellos se negaron.
Alguien los delata y el rey se enoja. Se enfrenta a Sadrac Mesac y Abednego y les da la oportunidad de cambiar de opinión: Pueden inclinarse ahora... o los arrojaré a un horno de fuego.
Entonces los 3, tienen una loca y audaz respuesta al rey, su jefe, el tipo al que sirven:
"Rey Nabucodonosor, no necesitamos defendernos ante ti en este asunto. Si somos arrojados al horno ardiente, el Dios a quien servimos es capaz de librarnos de él, y él nos librará de la mano de Vuestra Majestad.
...bien, abróchense los cinturones para esto...
Pero aunque no lo haga, queremos que sepas, Majestad, que no serviremos a tus dioses ni adoraremos la imagen de oro que has creado."
- Daniel 3:16-18
Qué osadía. También muestra su fe. Saben que Dios puede librarlos, pero aunque no lo haga, deciden no doblegarse. Su audacia y su fe son enormes.
El rey se enoja tanto que sube la temperatura y ata a los tres con toda la ropa puesta.
Los llevan al horno. Los soldados que los llevan al horno se caen y mueren porque el calor es muy intenso. Y entonces los 3 caen en el horno 😱🔥
El rey mira dentro: ¿Eh? ¿qué veo?
"¿No eran tres los hombres que atamos y arrojamos al fuego? Veo a cuatro hombres que andan por el fuego, sin ataduras ni heridas, y el cuarto parece un hijo de los dioses."
- Daniel 3:24-25
Su fe era real 🙌🔥
El rey los llama, reconociendo que su Dios, nuestro Dios, es el único:
"Sadrac, Mesac y Abednego, siervos del Dios Altísimo, ¡salid! Venid aquí!"
- Daniel 3:26
Salieron. Sus ropas estaban intactas por el fuego, nada en ellos se había quemado, y no olían a humo.
¿Qué? ¿Cómo puede ser? Es una locura, imposible.
Esto no es sólo una historia de antaño. Comparto esto para desafiarnos. Dios quiere que nuestra fe sea como la de estos chicos.
La fe es la confianza total en alguien o en algo. Sadrac, Mesac y Abednego confiaban plenamente en Dios.
Nosotros también estamos llamados a eso, a confiar plenamente.
Pero ¿qué es realmente la fe, de dónde viene? ¿Dónde comienza? Tal vez te hayas hecho estas preguntas.
La fe no viene de tu interior, viene de Jesús.
Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios.
- Efesios 2:8
La fe es un don de Dios, no de uno mismo
En consecuencia, la fe viene de escuchar el mensaje, y el mensaje se escucha a través de la palabra acerca de Cristo.
- Romanos 10:17
No necesitamos producir fe, no podemos producir fe. Dios nos da la fe cuando escuchamos el mensaje de Jesús y la cruz
GenZ, Dios nos esta llamando a tener fe para ver cosas locas suceder. Solo necesitamos pedir este regalo de fe. Creer por ella mientras fijamos nuestros ojos en Jesús. Mientras mantenemos nuestro enfoque en Él, la confianza completa vendrá - eso es fe.
Escuchando la palabra de Dios, así que lee la Biblia en voz alta para ti mismo. Puede parecer una locura o una tontería, pero inténtalo. Un versículo o dos en voz alta esta noche, y de nuevo mañana, un pasaje o capítulo al día siguiente. Tal vez te conviertas en esa persona loca que lee su Biblia, pero también serás esa persona con una fe loca.